Dijo que su hija de 5 años se había ido con el padre: había puesto su cuerpo en una caja

Quienes conocen a Vanesa Alejandra Mansilla (27) cuentan que "nunca quiso" a su hija Milagros, de 5 años, quien había nacido prematura y estaba postrada. Que hacía "diferencia" con sus otros dos hijos, de 3 y 7 años, sobre todo con el más chiquito. Que era de salir de noche y dejarlos solos. Que a la nena nunca la higienizaba.

Pero esas personas jamás imaginaron lo que iba a suceder. La nena, que sufría enfermedades preexistentes, falleció por una "infección respiratoria", según lo determinó la autopsia practicada en la sede del Cuerpo Médico Forense de San Martín, que no pudo establecer la data de muerte.

¿Qué hizo Mansilla? Metió el cadáver en una bolsa y luego en una caja, la llenó de cemento que sacó de una obra en construcción cercana, en el partido de San Martín, y le puso una tapa. Luego lo dejó como mesa de luz en su habitación. Según creen, durante varios meses,

La mujer le contó a la Policía que adoptó esta esta actitud porque no supo qué hacer. "Me asusté", se excusó.

Todo se descubrió a partir de la denuncia de "averiguación de paradero" que hizo el padre de la nena el pasado 24 de octubre.

Los oficiales de la Delegación DepartamentaI de Investigación (DDI) de San Martín llegaron este lunes hasta la casa de la calle Catamarca al 3900, en la localidad de San Andrés, adonde se toparon con la horrorosa escena.

"La caja con el cuerpo la utilizaba como mesita de luz en su dormitorio", contó a Télam un investigador.

"Era una nena que nació prematura, que padecía múltiples enfermedades preexistentes y tenía una traqueotomía y una sonda nasogástrica", añadió.

El fiscal Daniel Cangelosi, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de San Martín, tenía previsto indagar este martes a Mansilla en el marco de una investigación por un posible "homicidio".

No obstante, se esperaban más pericias y actuaciones para determinar si la mujer asesinó a su hija o si falleció de manera natural.

"Hasta el momento no hay registro de que hayan existido denuncias previas por violencia de género", agregó el vocero.

El padre de la nena relató que Mansilla le dijo que había dado a la nena en guarda al servicio local en San Martín, debido a las malas condiciones en la que vivía en su casa.

Luego de que familiares la presionaran con insistencia para que revelara dónde estaba Milagros, la mujer finamente reconoció que había muerto.

"Dijo que todo pasó un día a la tarde, luego de bañar a sus tres hijos. Se fue a dormir una siesta y al despertar fue a ver a la niña y ya había fallecido. Dijo que tenía mocos en la nariz y baba en la boca, que se ahogó", explicó un investigador.

Según pudo saber Clarín, Mansilla había sido entrevistada por trabajadoras sociales del municipio, a quienes les dijo que no le contó antes a su familia lo que había hecho "porque tenía miedo", aunque no explicó por qué ni se mostró angustiada.

De acuerdo a los primeros testimonios en la causa, la última vez que vieron a la nena fue el 30 de julio, para el cumpleaños de uno de sus hermanitos. Vanesa le dijo a su familia que Milagros no estaba en su casa porque se había ido con el padre. Una mentira que destapó una maniobra espantosa.

Tras la detención de Mansilla, los dos hijos quedaron a resguardo provisorio de su abuela materna.

EMJ