¿Es posible reactivar el turismo en Baleares esta temporada 2020?

Aún a riesgo de que se me tome por loco, mi opinión es que sí y voy a intentar explicar una estrategia que considero viable, presentando un esquema muy simplificado de plan de acción.

Primera cuestión: ¿Quiénes pueden ser los clientes, los turistas que viajen a Baleares en 2020?

Todas aquellas personas de cualquier mercado emisor que estén inmunizados contra el Corona virus COVID-19 (SARS-CoV-2) como consecuencia de haber pasado ya la enfermedad; pero ¡ojo! no me refiero únicamente a los que la han padecido y figuran como "curados" sino sobre todo a aquellos que la han padecido y superado sin síntomas y que conforman un grupo mucho mayor.

La forma de conocer con exactitud quien está inmunizado es mediante las llamadas pruebas serológicas o tests rápidos. Estas se basan en la detección de inmunoglobulinas tipo IgM (más precoces) e IgG (más tardías) que aparecen en la sangre como parte de nuestra respuesta inmune frente al virus. La presencia de IgG pero no de IgM indicaría un contacto con el virus ocurrida en el pasado y ahora superada y, por tanto, la inmunidad del individuo y la imposibilidad de contagiar a otras personas.

Por supuesto, la combinación de uno o varios tests serológicos con resultado IgG positivo (sin presencia IgM) y un test del tipo PCR con resultado negativo antes de viajar, ofrecerían un nivel de confiabilidad todavía más elevado.

Para eso es crucial fomentar la realización de pruebas serológicas en nuestros mercados emisores para obtener datos fiables de todo aquel que desee viajar a Baleares en los próximos meses.

Segunda cuestión: ¿Cómo conseguir esos datos?

Pagando nosotros (como principales interesados) el coste de realización de la prueba serológica. El coste de un test rápido es bajo: según lo que he podido averiguar, entre 20€ PVP y 40 € (si lo realiza un laboratorio). Desde luego ese coste es ridículo frente al gasto medio por turista en Baleares (1.088€ o 162€ diarios en 2019 según Europa Press).

¿Quiénes somos ese "nosotros", es decir, quién concretamente debería pagar el coste de la realización de estas pruebas serológicas al turista? Yo pienso que todos los actores de la cadena de valor del sector estarían más que dispuestos a contribuir: agencias de viaje, OTAs, touroperadores, compañías aéreas, alojamiento (hoteles), rent a car, etc. Incluso, y a pesar de que personalmente estoy en contra de cualquier clase de subvención, en este escenario también las administraciones públicas (comunidad autónoma, consejos insulares y ayuntamientos turísticos) podrían/deberían contribuir.

En este sentido, nosotros deberíamos adquirir los Coronavirus Test Kit COVID-19 IGg IgM y encargarnos de la distribución a los potenciales turistas y recogida segura de resultados. Es posible que la producción mundial de estos tests sea insuficiente pero se está multiplicando el número de grupos de investigación y todos los fabricantes homologados están aumentando su producción. El reto es introducirnos como compradores en este mercado.

La organización y coordinación de este plan de acción, contando con la colaboración de toda la cadena de valor, tanto en origen como en destino, aún siendo compleja pienso que es factible.

Tercera cuestión: Servicios y libre movilidad del turista en destino.

En relación al alojamiento, obviamente no se trata de abrir todos los hoteles en todas las zonas turísticas de cada isla, sino más bien de un plan por fases en virtud del cual se podría comenzar con algunos establecimientos concretos en ciertas zonas e ir ampliando establecimientos y zonas a medida que el programa tuviera éxito.

Por otra parte, para ofrecer con una cierta normalidad los servicios turísticos en el destino (alojamiento y oferta complementaria) también es preciso disponer de suficiente personal, el cual no puede pertenecer al grupo de riesgo, esto es, no pueden ser personas sin anticuerpos y por tanto susceptibles de ser infectadas o de infectar a otros si tomaran contacto con el virus.

En consecuencia, un plan por fases se vislumbra como la mejor sino la única alternativa con perspectivas de éxito.

Otro asunto es cómo garantizar la libre circulación y movilidad de las personas inmunizadas, en este caso, de los turistas ya inmunizados, para que puedan disfrutar de una vacaciones en el destino en régimen de normalidad. Para ello sería requisito ineludible disponer de un pasaporte COVID-19 que identificara a esas personas sin restricción de movilidad.

Las tecnologías digitales son claramente la respuesta a este problema. Por su seguridad, ubicuidad, y su alta velocidad de implementación y adopción cuasiuniversal.

En este punto, por supuesto recomendaría que ese registro estuviera implementado con tecnología de cadena de bloques y que el pasaporte en sí fuera totalmente digital. La identificación del portador y la comprobación de validez y vigencia del salvoconducto sería un procedimiento en tiempo real y con las máximas garantías de seguridad y fiabilidad. En Baleares tenemos un sector tecnológico fuerte y muy capacitado, y creo que un proyecto de estas características podría desarrollarse en relativamente poco tiempo. Además constituiría un inmejorable caso de éxito de colaboración público-privada.

Cuarta cuestión: ¿Cómo hacer atractivo el destino Baleares en 2020?

En primer lugar debemos trabajar para ser un destino absolutamente competitivo, por lo tanto, habrá que eliminar cualquier barrera como, por ejemplo, la llamada Ecotasa, sobre la cual podría dictarse una moratoria. Los gobiernos regionales, nacionales y europeo deberían comprometerse a eliminar cualquier tipo de traba normativa, garantizando al mismo tiempo la seguridad de los ciudadanos en relación a la pandemia. La oferta privada también debe realizar un esfuerzo en hacer irresistible su producto y servicios.

En segundo lugar hay que diseñar y comunicar al mercado el mensaje de que Baleares es un destino de vacaciones seguro, explicando las medidas adoptadas y las herramientas tecnológicas implementadas y ofreciendo un servicio de información al público por diferentes medios y en su mismo idioma. No entraré aquí en cuáles deben ser las herramientas y medios: web, redes sociales, apps móviles, mensajería instantánea, chatbots... cualquiera que ofrezca un buen ROI.

Lógicamente, habrá que destinar importantes recursos económicos a inversión en publicidad online y offline, aunque por otro lado, esos recursos o parte de ellos ya estaban presupuestados (asistencia a ferias, campañas de publicidad institucional y privada, etc.) por lo que tampoco aquí deberíamos encontrar dificultades añadidas.

Finalmente, parece lógico concentrar los esfuerzos en incentivar las ventas en aquellos mercados emisores y segmentos de cliente que mayor margen proporcionan, no en todos por igual ni al mismo tiempo.

Conclusiones

Se atribuye a Albert Einstein la cita "Si una idea no parece absurda de entrada, pocas esperanzas hay para ella" y posiblemente todos los que trabajamos en el ámbito de la innovación estamos de acuerdo en su atemporal certeza. Yo, cuando menos, la comparto sin reservas.

Ante esta situación sobrevenida podemos tomar dos posiciones: tirar la toalla y confiar en la limosna de las ayudas públicas o utilizar la inteligencia, pensar fuera de la caja y adaptarnos a toda velocidad para mantener nuestro modo de vida y relanzar nuestros negocios.

En estas líneas he intentado dibujar un escenario en el que a mi juicio podría ser factible la reactivación (parcial) del turismo en Baleares en el corto plazo con el objetivo de no cerrar la temporada 2020 en blanco. Asumiendo que en el momento que exista una vacuna efectiva para el COVID-19 estas medidas quedarán superadas, sin embargo, la solución formaría parte de nuestra caja de herramientas para el futuro y sería aplicable a potenciales nuevas amenazas.

Mi deseo con estas ideas y esbozo de plan de acción, las compartan ustedes o no, es simplemente hacer una llamada primero a la reflexión y luego a la acción decidida, que dirijo principalmente a nuestro gran sector turístico de Baleares para que, junto con la ayuda y colaboración estrecha de nuestro sector tecnológico, asuman una posición de auténtico liderazgo y ejemplo para otros.

Referencias y créditos

Aquí una excelente explicación del Dr. Ignacio López-Goñi, catedrático de Microbiología en la Universidad de Navarra sobre los diferentes tipos de test COVID-19.

En este recomendable artículo publicado por el MIT Technology Review el 7 de abril de 2020, Neel V. Patel explica y plantea varias de estas ideas, aunque no orientadas específicamente al turismo.

Crédito de la imagen de cabecera: Mylene2401 en Pixabay.

Descargo de responsabilidad

Este artículo expresa exclusivamente mis opiniones personales, las cuales no necesariamente coinciden con la posición y criterio de la compañía para la que trabajo: AT4 THE DIGITAL WAY.