Viajar de manera sostenible es posible. ¡Te contamos cómo!

Ahora que tras las complicaciones de la pandemia parece que el turismo empieza a recuperarse, ¿por qué no aprovechar la oportunidad para hacerlo de manera sostenible e impulsar así la transición verde? 

Cada vez más sostenible

Las opciones de viajar de una manera más sostenible y respetuosa con el medio ambiente son cada vez más habituales y la tendencia apunta a desarrollar modelos de negocio que ayuden a luchar contra el cambio climático. Ejemplo de esto es el uso de vehículos compartidos, aviones con motores mucho más eficientes y que reducen la emisión de gases de efecto invernadero o el tren, un medio que suele ser más económico, limpio y cada vez más rápido gracias a las redes de alta velocidad.

Con la subida de los precios de los combustibles; el transporte y, sobre todo el terrestre, ha de reinventarse. Una alternativa factible y verde es hacerlo encaminándose a la movilidad eléctrica. Una transición impulsada por la Comisión con proyectos como  Moves III de Europa que recibe ayuda económica del plan de recuperación NextGenerationEU.

Una maleta llena de sostenibilidad

Viajar por Europa es extremadamente sencillo, gracias al Espacio Schengen únicamente con tu Documento Nacional de Identidad (DNI) puedes cruzar los puestos fronterizos europeos, tomar un avión, un coche o un tren destino Europa.

También es sencillo hacerlo de manera sostenible. Aquí te dejamos algunos trucos:

• De excursión o en el coche con botellas de aluminio o cristal. Estas son una solución ideal en la lucha contra los plásticos. Son económicas y se pueden usar durante más tiempo. Una opción cómoda y perfecta.
• Bolsas de tela para todo. Por ejemplo, para guardar parte del equipaje o para ir a comprar en tus destinos renunciando así a las bolsas de plástico de comercios y supermercados. Con ellas también se reduce la producción de plásticos. Estas bolsas son una opción ecológica, además, son reutilizables, pueden lavarse y muchas de ellas están hechas de materiales reciclados.
• Recicla tus desechos. Orgánico, envases y cristales. ¡Estar fuera de casa no puede ser una excusa! Con el reciclaje se ayuda a evitar desperdicios y fomentar la reutilización de estos productos para otros usos. Y esto puede hacerse en cualquier lugar de tu viaje.
• Reducir el uso de combustibles fósiles y energía. Por ejemplo: apaga tus dispositivos en stand-by cuando te vayas de vacaciones, así no solo será un beneficio para el planeta, sino también para tu bolsillo.
• Compra localmente. ¿Qué mejor que disfrutar de los comercios locales y descubrir sus curiosidades ahora que estás de viaje? Es hasta una atracción turística más. Comprando localmente se reduce la contaminación por logística y almacenamiento.
• El transporte público, una opción ideal. No solo reduces el gasto que supone un coche y fomentas las vías más sostenibles, si no que también es una manera local de descubrir los destinos. Y también puedes optar por alquilar una bicicleta para recorrer las ciudades.
• Ahorra agua y respeta la naturaleza. El consumo responsable también debemos tenerlo presente al viajar. Aunque estemos en un hotel y fuera de nuestra casa, debemos evitar malgastar recursos. ¡Son de todos y no queremos que escaseen en ningún lugar del mundo! Lo mismo con los entornos naturales, la fauna y la flora de los paisajes que recorramos. Protegerlos y cuidar de ellos es nuestro deber.

Según los datos de la Organización Mundial del Turismo, Europa fue el año pasado el destino elegido por el 67% de los turistas a nivel internacional. Europa es un lugar perfecto no solo en verano, también en el resto del año multitud de turistas de los lugares más recónditos optan por Europa por la variedad de la que provee durante los doce meses: desde glaciares hasta playas paradisíacas. ¡Ahora ya sabes que puedes disfrutarla de muchas maneras y siendo sostenible!

¡El cambio global empieza en ti!