Luego de la pandemia se ha creado más conciencia sobre dónde y cómo habitamos, el desafío de planificar ciudades contemporáneas y sostenibles radica en considerar la dinámica de los sistemas urbanos, la función y mantenimiento de estructuras estéticas y ordenadas, sustentadas directa o indirectamente por sistemas naturales.
Este año vemos un aumento en las tendencias de arquitectura inspiradas en estructuras autosuficientes con espacios interiores flexibles, enfocados en una mayor vida al aire libre. El Canada Green Building Council dice que se podrían evitar más de 4 millones de toneladas de dióxido de carbono para 2030 si se siguen construyendo nuevas estructuras que no produzcan carbono, tanto en sus procesos de fabricación como durante su ciclo de vida.
Utilizar el ingenio y el arte, bajo enfoques en la biodiversidad como objetivo principal en diseños arquitectónicos, ayudará a que el mundo construido pueda tener un gran impacto para reducir la cantidad de desechos y emisiones que generan los seres humanos, y que por consecuencia afectan a los otros seres vivientes, permitiendo ciudades que hagan uso correcto de los recursos naturales a través de la evolución arquitectónica y las nuevas tecnologías y diseños.
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Acesco. La Confianza que nos une.
