Mayo ha sido el mes más violento en Puebla en lo que va del año, pues reporta el mayor número de delitos y sobre todo el que más homicidios contabiliza: fueron 128 muertes violentas durante los 31 días lo que representa que cada día mataron a cuatro personas, y más de la mitad de las víctimas fueron asesinadas con algún tipo de arma.
La diferencia fue mínima con la cifra que registró febrero, la cual ahora se convirtió en el segundo mes con el número de asesinatos más alto pues contabilizó 127 asesinatos, es decir, un caso menos que mayo del presente año, seguido de abril que ocurrieron 125 homicidios.
De los homicidios dolosos perpetrados en mayo, 59 se cometieron con arma de fuego, nueve con arma blanca y 21 con otro tipo de elemento. En tanto que los culposos, fueron 38 por accidente de tránsito y uno más que no se especificó.
El número de denuncias también aumentó durante el mes de referencia, al registrarse 695 carpetas de investigación, mientras que en el mes de abril fueron 602.
Los números de la Fiscalía General del Estado refieren que fueron siete mil 217 delitos durante mayo, la incidencia delictiva en todo el estado aumentó 14 por ciento en comparación con abril y cada día se cometieron 232 hechos delictivos, casi 10 cada hora.
Durante mayo fueron 888 hechos delictivos más que abril y uno de los delitos que repuntó fue el de homicidio al registrarse 128 casos, tres más que el mes previo.
Los homicidios que serán recordados
Entre los hechos violentos de este mes destaca el feminicidio de Cecilia Monzón Pérez planeado por Javier López Zavala, pues este sujeto le ordenó a su sobrino y a un sicario que la emboscaran y la asesinaran de al menos seis disparos, los hechos ocurrieron el 21 de mayo en Camino Real a Momoxpan y Periférico.
Otro hecho que conmocionó a los poblanos en mayo fue el hallazgo del cadáver de Sandra Elizabeth Pérez Portillo, pues después de permanecer un mes secuestrada, su cuerpo fue encontrado al fondo de una cisterna el 27 de mayo en San Mateo Mendizábal, perteneciente a Amozoc, pues las personas que la privaron de la vida la arrojaron a este depósito de agua ubicado en una casa que rentaron exclusivamente para tener cautiva a la madre de 32 años.
Fernanda Escobedo
@mf_escobedo