importantes están: ingresos totales anuales, número
de colaboradores, carga fiscal, rentabilidad.
Para el año 2015, según el SRI se conoce que las
Pymes aportaron con el 90% de las unidades
productivas, generaron un 70% de empleo; fueron
participes de aproximadamente el 50% de la
producción. Esto es sustentado también por la revista
Ekos, dentro la cual se da a conocer que, en la
actualidad, en Ecuador, el 70% de todas las empresas
registradas en la Superintendencia de Compañías son
Pymes, estas aportan más del 25% del PIB no
petrolero del país y su generación de mano de obra
bordea el 70% de toda la PEA. (EKOS, 2016). A esta
situación favorable, se le atribuye la capacidad de
absorción de empleo que las Pymes tienen, así como
también, la ventaja de acoplarse ante cualquier
variante debido a la flexibilidad de sus estructuras.
(CRECE NEGOCIOS, 2009)
La Superintendencia de Compañías, Valores y
Seguros, da a conocer que actualmente en el Ecuador,
52.554 empresas reportaron sus balances hasta el 30
de junio de 2016, y según clasificación de ingresos,
21.922 son Pymes. De estas, el 31% son consideradas
medianas y el 69%, pequeñas. En 2015, estas
reportaron ingresos de USD 25.962,4 millones; el 26%
del total del PIB ecuatoriano. Este desempeño
económico generó utilidades de USD 1.366,9 millones
y una tasa de rentabilidad sobre ingreso del 5,3%.
(EKOS, 2016)
Como se puede observar, la interrelación entre el
crecimiento de las Pymes y el desarrollo de la
economía en Ecuador, se debe a que estas empresas
influyen
directamente
en
los
indicadores
macroeconómicos, al incidir con fuerza en la
generación de empleo, tributos y comercio exterior. En
lo referente a esto se puede mencionar la evaluación
entre el peso de los impuestos sobre las ventas (carga
fiscal), que las empresas medianas tienen en
promedio. Para 2011, aquellas con mayor carga fiscal,
fueron de los sectores de bienes raíces (3,93%),
telecomunicaciones (2,12%) y servicios diversos
(2,09%), estos números se atribuyen a la consecuencia
del valor agregado que generan estas actividades.
(Revista EKOS, 2012)
Con respecto a otro criterio de evaluación sobre cuán
importante son las Pymes, se conoce que la
composición del sector privado está dividida de la
siguiente manera: 55% en microempresas, 29% en
pequeñas empresas, 13% medianas empresas y tan
solo un 3% en grandes empresas; esto con respecto al
número total de entidades productivas. Por otro lado,
con respecto al porcentaje de ingresos que cada una
de las categorías antes mencionadas aportan, se
obtiene lo siguiente: una micro empresa genera un 1%,
pequeña empresa 5%, mediana 19%, y como es
claramente entendible, las grandes empresas un 75%.
(EKOS, 2016)
Vale la pena mencionar la relación entre las Pymes y
su aporte al crecimiento del PIB, lo cual refleja también
la rentabilidad del desempeño de las diversas
actividades en las que participan las pequeñas y
medianas empresas. Por ejemplo, en el año 2011,
según datos del Banco Central del Ecuador (BCE) se
registró un crecimiento cercano al 8% en la economía
nacional debido al aumento en la producción de
diversas actividades. En base a estas cifras, se
destacó el crecimiento del 21,6% en la construcción,
13,4% en alojamiento y servicios de comida, correo y
comunicaciones 12,5%, entre otros. Según
estadísticas de la Superintendencia de Compañías,
Valores y Seguros, la clasificación de las Pymes por
actividad demostró su rentabilidad (Ver Figura 4).
(Revista EKOS, 2012)
Con respecto a las figuras antes presentadas, los
valores expuestos se encuentran en USD miles, y
dentro de la metodología de clasificación se consideró
lo siguiente:
• Ingresos Totales: Ingresos de actividades
ordinarias + otros ingresos
• Utilidad: Utilidad bruta antes de impuestos y
participación a trabajadores
• Rentabilidad: Utilidad bruta / Ingresos totales.
Se puede inferir que la actividad más representativa de
las medianas empresas fueron las actividades
pertenecientes a la sección F de la CIIU, es decir,
actividades financieras con un 27,8% de rentabilidad.
A esto le sigue las actividades inmobiliarias con un
16% de rentabilidad, que como se expuso en la figura
7, son las que también más carga fiscal aportó. Con un
9,8% se encuentran las actividades profesionales,
científicas y técnicas, cuya cantidad de empresas es
de 417. Se observa que el número de medianas
empresas que se dedican al comercio al por mayor y al
por menor es de 2520, sin embargo, la rentabilidad que
estas aportan es de tan solo un 3,8%. (Ver Figura 5)
(EKOS, 2016)
Con respecto a las pequeñas empresas, las
actividades financieras aportaron una rentabilidad del
19,2% con un total de 394 empresas. Seguido a esto,
las actividades inmobiliarias aportaron un 14,4%;
según la CIIU, esta sección comprende las actividades
de arrendadores, agentes y/o corredores en una o más
de las siguientes operaciones: venta o compra de
bienes raíces, alquiler de bienes raíces y prestación de
otros servicios inmobiliarios, como los de tasación
inmobiliaria o los de depositarios de plicas
inmobiliarias. Las actividades profesionales, científicas
y técnicas, presentaron una rentabilidad del 7,3% con
1842 empresas. (EKOS, 2016)
Sin duda, es tal la importancia de las Pymes, que el
reconocimiento al trabajo realizado por estas no solo
es cuestión de nacionalismo sino también de
galardones que motiven sus actividades. Por parte de
Ekos, como revista de negocios, en su edición de
diciembre del 2015 “XII Ekos de Oro” dedicó una
sección a la premiación de ciertas Pymes, que cumplen