Redacción Fuser News con información de Telesur
En el marco del Día Nacional del Derecho a la Identidad en Argentina, las Abuelas de Plaza de Mayo, cumplen 44 años de lucha consagrados a localizar y restituir a sus familias legítimas a los niños apropiados por la última dictadura que vivió el país.
Este viernes los argentinos rinden homenaje a ese colectivo de mujeres que intenta recuperar a sus nietos secuestrados, y a las que históricamente han acompañado en sus batallas junto a diversas voces de la política y en defensa de los derechos humanos, indica el portal web de Telesur.
Hace más de cuatro décadas, 12 mujeres se unieron el 22 de octubre de 1977 para buscar a los hijos de sus hijos, nacidos en cautiverio y entregados a otras familias. Hoy muchas de esas mujeres ancianas y apoyadas en bastones se mantienen firmes como el primer día.
Estela de Carlotto luchadora incansable
“Somos nosotras, las abuelas de carne y hueso, personas comunes que nunca nos soltamos las manos. Son nuestros nietos y nietas que fuimos encontrando en el camino, y son el puñado de amigos que no nos dejaron solas”, dijo la presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto, en una entrevista a medios locales.
A Carlotto también la homenajean este día, pues la incansable luchadora cumple 91 años, aún activa frente a la organización.
El secretario de Derechos humanos, Horacio Pietragalla, uno de los nietos recuperados, declaró a los medios que “la idea de esta iniciativa es interpelar a los hombres y mujeres que tienen una duda y decirles que es el momento de acercarse y también de hacer algo tan simple como acompañar la búsqueda de Abuelas de Plaza de Mayo”.
Los jóvenes que buscan tienen una edad promedio entre los 38 y 46 años. La campaña diseñó varias piezas de comunicación para apelar a las memorias de la infancia, con muñecos de plástico, películas de la época o algunos juguetes que fueron populares antaño.
Desde 2004, el Congreso de la Nación instituyó el 22 de octubre como el Día Nacional por el Derecho a la Identidad. En esta fecha las Abuelas iniciaron su bregar sin descanso, que continúa con la esperanza de encontrar a los nietos, en un rescate de la memoria, la justicia y la verdad.
