El regreso de la Pantera Rosa (1975), de Blake Edwards

El famoso diamante conocido como “Pantera Rosa” ha sido robado con todas las señas de identidad de un ladrón ya retirado apodado El Fantasma. Éste será el principal sospechoso para el indescriptible inspector Clouseau pese a que el viejo Fantasma afirma ser inocente. Dispuesto a limpiar su nombre, se la jugará al investigador francés con un montón de pistas falsas.

Once años después de la fantástica El nuevo caso del Inspector Clouseau, Blake Edwards volvió a ponerse tras la cámara para realizar esta tercera entrega de la saga de La Pantera Rosa y la única protagonizada por Peter Sellers en la que la MGM no tenía los derechos. La película fue premiada y aplaudida en todo el mundo, sobre todo por el impresionante y desternillante trabajo actoral de su indiscutible estrella, Peter Sellers.

La trama juega con la idea de que el ladrón no es quien parece, mientras el inspector Clouseau sigue metiendo la pata como es habitual. De nuevo tenemos gags desternillantes respaldados por el criado oriental o el jefe de tendencias suicidas, y es genial el modo en que Sellers exagera su acento francés. Christopher Plummer sustituyó a David Niven en el papel de sir Charles Litton con notable resultado. La película fue nominada, además, a tres Globos de Oro a la Mejor película comedia o musical, a la mejor Banda Sonora de nuevo de Henry Mancini y al Mejor actor de comedia o musical para el siempre único Sellers. El inglés, que contaba con 50 años cuando volvió a abordar uno de sus personajes más emblemáticos, muestra de nuevo su genialidad a la hora de jugar con las voces, los acentos y el humor físico heredado de sus maestros del slapstick como Buster Keaton o Stan Laurel.

Una pequeña joya de la comedia de los años 70 que ha logrado superar el paso del tiempo gracias a sus toques inefables y eternos de maestría y humor que el binomio Edwards-Sellers supo explotar como pocos han podido en la industria del cine.